7 COSAS QUE MUCHAS PERSONAS NO SABEN ACERCA DE LOS MAESTROS



Como estudiante, ni siquiera podía adivinar qué hacían mis maestros cuando no estaban enseñando. Sobre todo porque no me importaba lo suficiente como para prestar atención. Claro, sabía el impacto que algunos de mis maestros y entrenadores tuvieron en mí, pero la mente adolescente no me permitió comprender lo que un maestro hace todo el día.

Avancé unos años y tuve la picazón. Mi experiencia en Swazilandia trabajando con jóvenes me llevó por el camino de la educación. Quería ser maestra ... y mis clases me estaban mostrando que el trabajo tenía mucho más de lo que pensaba originalmente. Después de días de observación en varias escuelas y distritos de Pensilvania, finalmente llegué a la enseñanza de estudiantes. Por suerte para mí, mi profesor colaborador fue el ajuste perfecto. Paul me llevó al colegio el primer día explicando lo que todos hicieron (no solo él mismo). Hablamos sobre los deberes, las reuniones del personal, las colaboraciones de los departamentos, el papel de la administración y, por supuesto, los estudiantes. No se cansó de mis preguntas (al menos que yo sepa de ja) y me dejó ir solo unas cuantas veces antes para mojarme los pies. Pero sobre todo, aprendí observando cómo interactuaba con sus estudiantes, sus colegas,

Ahora estoy en el otro extremo del espectro de la enseñanza. Soy un administrador a nivel de distrito y mi hija está en tercer grado, mi hijo en Kindergarten. Estoy entusiasmado con mis roles como administrador y padre de niños en edad escolar, pero tampoco quiero olvidar lo que los maestros hacen diariamente para nuestros estudiantes. Porque los profesores hacen mucho . De hecho, noté que al hablar con muchas personas no entendían todo lo que implica la enseñanza. Aquí hay siete cosas que hacen los maestros que mucha gente nunca piensa ...

1. PLANEAMOS ... MUCHO
Los maestros planean todo el año (sí, especialmente en el verano). Con un currículo, normas y tecnología siempre cambiantes y casi siempre nuevos ... siempre hay cambios que se deben hacer cuando se mira el "panorama general" del año escolar. Sin embargo, la mayor parte de la planificación se produce durante el año escolar cuando se deben crear lecciones, actividades y evaluaciones ... luego modificar ... luego ajustar ... y luego cambiar nuevamente para diferenciarse dentro del aula. Muchos maestros que conozco realmente disfrutaron el proceso de planificación y se enorgullecieron de sus lecciones, actividades y evaluaciones. Los maestros con los que trabajé en los últimos dos años pasaban casi 20 horas a la semana planeando, y con frecuencia más.

2. NOS IMPORTA ...
Los maestros se preocupan como locos. Queremos que todos nuestros estudiantes tengan éxito e intentaremos cualquier cosa para que se sientan realizados. Esto puede llevar a muchas discusiones sobre "qué hacer" y las horas que se pasan fuera del "tiempo de clase" general trabajando con los estudiantes para ayudarlos a superar las dificultades. He conocido a muchos maestros que traen este hogar con ellos también. El uso de su corazón en la manga para los estudiantes y las familias es parte del trabajo para muchos maestros.

3. COLABORAMOS COMO MÚSICOS.
Venga a una escuela y verá maestros trabajando juntos, planificando lecciones, hablando a través de puntos curriculares y creando proyectos. Hemos compartido documentos en línea donde las notas se llenan durante el año escolar y durante el verano. Mejor aún, las redes sociales en línea y las herramientas como Twitter han aumentado de manera exponencial. Tenemos "chats de Twitter" para casi todos los "subtemas" posibles en el campo educativo. Se acabaron los días en que los maestros cerraron las puertas de sus aulas, en cambio, es abierto y compartido con el mundo.

4. NOS TOMAMOS EN SERIO NUESTRA PROFESIÓN.
Pasamos horas decorando, organizando y haciendo de nuestro aula un entorno de aprendizaje perfecto. Asistimos a conferencias para conectar con otros educadores durante todo el año (y especialmente en el verano). Escribimos blogs, libros, lideramos servicios, discutimos en línea y en persona cómo podemos mejorar la educación de los niños en nuestra propia escuela y en todo el mundo.

5. SOMOS APRENDICES DE POR VIDA.
Continuamos aprendiendo tanto formal como informalmente a medida que crecemos como profesionales. Las escuelas han estado cambiando y los maestros están cambiando junto con ellos. No es fácil revisar completamente el currículo, la tecnología y los estándares, pero los maestros están haciendo esto una y otra vez. ¿Por qué? Porque el aprendizaje está en nuestro ADN. Es quiénes somos y por qué enseñamos y valoramos una buena lección sobre una fácil. Sabemos lo que es ser un estudiante, por lo que podemos crear mejores experiencias para nuestros propios estudiantes.

6. HACEMOS MUCHO MÁS QUE ENSEÑAR.
Personalmente, entrené a dos equipos (fútbol y lacrosse), dirigí un gran club escolar (FANS), escribí el plan de estudios, ayudé a planificar eventos después de la escuela, escribí recomendaciones para la universidad, ayudé a los estudiantes de último año con sus proyectos de graduación (cosas como crear un torneo de dodgeball), y mucho más. Esto no es solo yo, esto es maestros por todas partes. Claro, enseñamos todos los días. Pero también estamos haciendo mucho más que enseñar. Todos los días.

7. NO NOS EDUCAMOS POR DINERO, PERO ESO NO SIGNIFICA QUE NO LO NECESITEMOS.
No encontrarás muchos maestros que se hayan educado para ganar buen dinero. Sin embargo, eso no significa que no vamos a luchar por aumentos de sueldo y que nos paguen lo que sentimos que merecemos. Esto es diferente de un distrito a otro, de un estado a otro y de un país a otro. Pero, por favor, no piense que los maestros que luchan por sus ingresos para mantener a sus propias familias no se preocupan por sus hijos. Estamos seguros de hacer.

Me doy cuenta de que cada uno ha tenido su propia experiencia buena y mala con los maestros en su propia vida. Algunos probablemente han sido demasiado positivos y estoy seguro de que algunos han sido negativos. Al convertirme en padre de un estudiante, nunca quiero olvidar lo que hacen los maestros todos los días que van más allá de sus responsabilidades laborales. Eso es lo que hace que esta profesión sea tan gratificante, y es por eso que amamos a nuestros maestros.

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